La cocina tradicional nos ha dejado un gran legado de valor inigualable. Platos de gran sabor, acompañamientos, recetas originales y por supuesto, ¡postres! Hoy queremos compartir un plato cocinado con base de postre y que seguro que en alguna ocasión has podido probar.
Se trata del pan frito, con azúcar o no (dependiendo del gusto de cada persona) y que podemos consumir en cualquier momento del año. Además, nos viene perfecto para aprovechar los restos de pan de días anteriores.
Los ingredientes necesarios son: pan del día anterior, azúcar y aceite de oliva. A continuación, explicamos los pasos a seguir:
- Cortar el pan en rebanadas, no demasiados finas, para que no se deshaga. El tipo de pan, a gusto de cada persona.
- En una sarten, colocar el aceite de oliva y calentar.
- Cuando esté muy caliente, y para que el pan no absorba demasiado aceite, añadir las rebanadas.
- Una vez que el pan esté dorado por las dos caras, lo retiramos.
- Espolvorear con azúcar.
Así de fácil resulta esta sencilla receta con la que puedes improvisar un postre que seguro encantará a tus invitados o que puedes tomar incluso como desayuno.
Este es sólo un ejemplo. Pero la versatilidad del pan frito da para mucho y puedes combinarlo como quieras. Por ejemplo, puedes probar el pan frito jugoso como explican en esta receta o el pan frito al orégano. Y si eres atrevido, el picante que proponen en Cookpad te va a encantar 🙂