Si tuviésemos que descomponer la Semana Santa en iconos hablaríamos del azahar, el incienso, la cera en el suelo, capirotes de colores y un postre, un postre típico y muy nuestro que ha pasado de generaciones en generaciones hasta convertirse en tradición. La Torrija
Ingredientes:
- Pan de torrijas o rebanadas
- Medio litro de vino blanco
- 3 cucharadas grandes de azúcar
- 1 cucharada grande de canela molida
- Huevos
- Medio tarro de miel de kilo
- 2 cucharadas de azúcar.
- Agua
- Aceite de girasol
Preparación:
Lo primero es poner el pan en una bandeja unas 3 horas antes de empezar con la preparación, en un cazo el vino blanco, azúcar y la canela. Lo vamos removiendo hasta que todo esté disuelto.
Entonces mojaremos el pan en el vino y las pasamos la bandeja, dejándolas reposar 5 minutos.
En otro cazo mezclamos miel, agua (la mitad que de miel) y azúcar. A fuego lento se cuece sin que hierba, cuando la consistencia sea el punto medio entre miel y agua lo apartaremos. Se deja templar.
En una sartén vamos calentando el aceite de girasol, mientras batimos los huevos y le añadimos un poco de agua. Vamos pasando las rebanadas por el huevo y a freír en la sartén que no debe estar muy caliente. Cuando la torrija se pone dorada por los dos lados es el momento de sacarla y escurrir en papel de cocina.
Ya sólo falta remojar en la miel antes preparada y colocar en la bandeja para su disfrute.